¡Soy un monstruo!. Y no sólo por la
cicatriz de mi cara, sino por las de mi interior. Ella no debe estar con
un criminal como yo. Ella es un ángel. Dulce, hermosa e inocente. Tan
inocente. Ah, y también es la hija de mi nueva esposa. La vi desnuda,
pero fue un accidente. Sentí que mi determinación se rompía y supe que
tenía que alejarme de ella.
Pero ahora su madre me pide
ayuda. Lily se está portando mal, hablando con chicos que no la
merecen, y necesita mi ayuda para ponerla a raya. Pero mi lujuria por
Lily es imposible de contener, y si vuelvo a acercarme a ella, puede que
no sea capaz de controlarme...
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